Carlos Monroy es corresponsal del periódico Nuestro Diario en Zacapa, a unos 112 kilómetros de la capital del país, y sufrió un ataque a balazos en su domicilio el pasado 2 de septiembre. Según informó la Asociación de Periodistas de Guatemala (APG) en un comunicado, "el hecho armado fue perpetrado aparentemente por una persona que vive en el sector, donde reside el comunicador y el motivo, según las palabras del afectado, se debe a que el agresor no le pareció la forma como se le dio tratamiento a una noticia que fue publicada en la sección departamental del referido medio de comunicación, para el cual trabaja".

La APG también señaló que "ante tal situación la máxima entidad de prensa hace un llamado a la Policía Nacional Civil-PNC-para que preste protección al comunicador y al Ministerio Público -MP-para que realice las averiguaciones pertinentes y que deduzca las responsabilidades penales que ameriten el caso".

"El reportero cumplió con la función de informar un hecho de relevancia en el departamento de Zacapa, por lo que se le solicita al ministro de Gobernación, girar las instrucciones del caso, para que actúen inmediatamente y que recaiga el peso de la justicia contra el responsable de haber disparado contra la residencia del comunicador", reclamó la organización.

El hecho también mereció el repudio de la Red de Periodistas, que expresó: "La Red de Periodistas condena el ataque armado contra la casa del periodista de Zacapa exigiéndole al Ministerio de Gobierno una exhaustiva investigación de este atentado".

Esta situación se suma al reciente pronunciamiento de funcionarios de las Naciones Unidas sobre las condiciones de detención de José Rubén Zamora, periodista y director del medio El Periódico, que fueron calificadas como inhumanas.

La Federación Internacional de Periodistas se suma al repudio de la Asociación de Periodistas de Guatemala y de la Red de Periodistas y acompaña el reclamo a las autoridades nacionales para tomar medidas que garanticen el derecho al trabajo de lxs colegas y pongan un freno al deterioro de las complejas condiciones para ejercer la libertad de expresión en el país.