El ataque israelí con drones que mató a dos periodistas, hirió gravemente a un tercer periodista freelance, Hazem Rajab, que iba en el coche. El equipo de prensa conducía tras haber filmado las secuelas de un bombardeo israelí contra una casa de familia en la ciudad meridional de Rafah, en el que murieron decenas de civiles.
La agencia de noticias palestina WAFA informó de que otros dos periodistas resultaron heridos en el ataque: Ahmed Al-Burash y Amer Abu Amr, que trabajan para Palestina Hoy TV.
La cadena de medios de comunicación qatarí Al Jazeera acusó a Israel de atacar deliberadamente el coche, en el que viajaban periodistas palestinos que se encontraban realizando su labor informativa.
Un portavoz de las Fuerzas de Defensa Israelíes (IDF), citado por Times of Israel, declaró que "un avión militar identificó y atacó a un terrorista que operaba un avión de forma que ponía en peligro a las IDF".
Semanas después del comienzo de la guerra en Gaza, el ejército israelí anunció que no podía garantizar la seguridad de los periodistas en el enclave. El 28 de octubre, la FIP, junto con su organización afiliada, el PJS, llamó a que el gobierno israelí cumpliera plenamente la legislación internacional en materia de derechos humanos y el derecho internacional humanitario, y que actuara para impedir cualquier crimen de guerra, crimen contra la humanidad y genocidio.
Hasta la fecha, al menos 78 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación palestinos han muerto durante la guerra de Gaza, según datos de la FIP. La Federación se esfuerza por mantener su lista actualizada y exacta, buscando múltiples fuentes para cada nombre añadido y concentrándose en quienes trabajan como periodistas y en los medios de comunicación.
El Secretario General de la FIP, Anthony Bellanger, declaró: "Lamentamos la muerte de nuestros colegas Hamza Al-Dahdouh y Mustafa Thuraya. Nuestros pensamientos están con sus familias y sus seres queridos. Condeno enérgicamente el indignante ataque israelí con drones contra el coche en el que viajaban periodistas palestinos en servicio y reitero que los autores del crimen deben rendir cuentas".
La FIP advierte de que todos los periodistas palestinos están bajo vigilancia de Israel, que utiliza sofisticadas innovaciones en inteligencia artificial para hacer seguimiento sobre ellos.
"Según el artículo 79 de la Convención de Ginebra, los y las periodistas en zonas de guerra deben ser tratados como civiles y protegidos como tales. La FIP recuerda que la contravención del mencionado artículo es un crimen de guerra, ya que se trata del asesinato deliberado de civiles, incluidos periodistas", concluyó Bellanger.
"El ejército israelí se ha jactado anteriormente de sus sistemas de selección de objetivos mediante inteligencia artificial que le permiten identificar víctimas potenciales a gran velocidad y escala. En Israel se encuentran algunos de los sistemas de vigilancia más sofisticados, que se han utilizado repetidamente contra periodistas. Sin pruebas que demuestren lo contrario, todos los indicios apuntan al asesinato intencional de reporteros y camargógrafos. No podemos permitir que esto continúe", declaró la Federación.