La Federación Internacional de Periodistas condenó las continuas agresiones y los asesinatos de periodistas y trabajadores de medios en Irak, tras el secuestro y asesinato de un reportero local en el sur de la ciudad de Basora.

En horas de la mañana, Fakher Haider, quien trabajó por más de dos años para el New York Times, fue hallado muerto al sur occidente de Basora, con las manos atadas y un impacto de bala en la cabeza. El domingo a la media noche, cuatro hombres encapuchados llegaron a bordo de un Toyota al hogar de la familia Haider, en el centro de Basora. Se presentaron como miembros de servicios de inteligencia y solicitaron interrogar al periodista.

“Es claro que en todo Irak existe una amenaza contra los periodistas, no solamente en el triángulo sunita o en las zonas “rojas” de Bagdad,” afirmó Robert Shaw, funcionario de Derechos Humanos e Información de la FIP. “La ola de terror contra la reportería independiente está en su punto de mayor intensidad”.

La FIP expresa gran preocupación por ser Haider es el segundo periodista secuestrado y asesinado en Basora en los últimos dos meses.
Steven Vincent, reportero Americano freelance escribía un libro sobre la ciudad. En su columna de opinión para el New York Times criticó a las fuerzas de seguridad de Basora. Fue secuestrado y su cuerpo sin vida descubierto en agosto. Su traductora también fue secuestrada y recibió varios impactos de bala, pero sobrevivió y se recupera en un hospital.

Según fuentes locales, ambos asesinatos están relacionados con investigaciones a las fuerzas de seguridad que están bajo el creciente control de milicias leales a dos grupos políticos chiítas.

“Ha sido imposible que los medios extranjeros trabajen libremente en Irak, y ahora es aún más peligroso para los periodistas iraquíes que trabajan con medios internacionales”, comentó Shaw.

Con el asesinato de Haider, son 96 los periodistas asesinados en Irak desde el comienzo de la guerra en marzo del 2003, y 25 en lo que va corrido del año.

En agosto de este año, la FIP lideró un encuentro con más de 40 profesionales de medios y asociaciones de periodistas de todo el país. Durante el encuentro se adoptó un Acuerdo para Derechos Sociales y Profesionales, y se pusieron en marcha una serie de propuestas tendientes a fortalecer la independencia periodística. “Para obtener una mayor protección, los periodistas iraquíes deben organizarse, permanecer unidos y presionar por sus derechos sociales, profesionales y democráticos,” dijo Shaw.

La FIP está gestionando una declaración del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para que resalte las amenazas que enfrentan los periodistas y trabajadores de medios que laboran en zonas de conflicto.

“Hasta la fecha, con al menos 68 periodistas y trabajadores de medios asesinados en el mundo, las cifras de colegas muertos son muy alarmantes. La comunidad internacional debe prestar atención a esta crisis que se profundiza”, concluyó Shaw.

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