La Federación Internacional de Periodistas, FIP, expresó su alivio a raíz de noticias sobre la liberación de la periodista Munusamy Parameshawary.

La FIP realizó campañas por la libertad de la reportera de 23 años, desde su arresto el 21 de noviembre del 2006, por parte de la División de Investigación de Terrorismo, TID, de la policía nacional. A pesar de la larga detención de cuatro meses, Parameshawary fue liberada el 22 de marzo sin ningún cargo en su contra.

El Presidente de la Federación, Christopher Warren, afirmó que este hecho es una victoria para los derechos humanos y la libertad de prensa.

“Estamos muy felices de conocer que la detención de Parameshawary llegó a su final”, comentó Warren. “Es un triunfo para la justicia y la libertad de expresión en Sri Lanka”, agregó.

“Pero sigue constatado que en primer lugar, ella no debió parar en la cárcel. La detención de Parameshawary fue un ejemplo escalofriante de amenazas contra las libertades básicas en Sri Lanka. Es una desgracia que la legislación supuestamente introducida para proteger a los ciudadanos de Sri Lanka del terrorismo, es por el contrario utilizada para intimidar a los medios”.

“Es una victoria importante para los que se rehúsan a arrodillarse ante la presión gubernamental y da la esperanza de que con solidaridad, determinación y vigilancia, es posible lograr un país pacífico y abierto”.

Parameshawary estuvo detenida bajo las leyes de Prevención de Terrorismo y por muchas semanas ni siquiera tuvo acceso a sus abogados, a su editor ni a su familia. Antes de su arresto, ella había informado sobre temas tamiles e investigaba las desapariciones en Colombo.

El 31 de enero, la FIP y organizaciones de periodistas, en más de 10 países, apoyaron el Día de Acción liderado por el afiliado de la Federación, el Movimiento de Medios Libres, FMM, y mediante una carta al gobierno de Sri Lanka, exigieron la liberación de la colega.

A nivel nacional, más de 500 postales fueron enviadas como protesta por la detención.

La FIP expresa gratitud a los grupos nacionales e internacionales y a los individuos, incluyendo al FMM, que trabajaron arduamente por la libertad de la reportera y exalta sus manifestaciones de solidaridad.

“La fortaleza y determinación demostradas en las campañas por la liberación de Parameshawary, envía el claro mensaje al gobierno de Sri Lanka de que las violaciones a la libertad de prensa y a los derechos de los periodistas no serán toleradas”, advirtió Warren.

“Exigimos al gobierno de Sri Lanka prestar oído a las críticas internacionales y a actuar con determinación para darle al país, medios de comunicación independientes, libres y seguros que se merece”, concluyó.


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