Estuve atrapado por tres días, en temperatura tropical de Santo Domingo para el Congreso de la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) – nuestra organizacion regional en esta zona del mundo – que contó como anfitrión con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP). Mi presencia en el Congreso fue descrita como histórica, ya que es la primera vez que el Presidente de la FIP participa en la agenda de trabajo de un congreso regional. También fue MI primera vez experimentando los azotes del huracán Tomás en República Dominicana que hizo del quinto congreso regional una gran "tempestad".
Más de 30 delegados representando a los 13 sindicatos afiliados en la región, se reunieron durante dos días para desarrollar políticas y hacer cambios en su constitución. Pero en el corazón del congreso también hubo debates sobre la seguridad de periodistas en México y Honduras, batallas intensas para salvar a los periódicos, como la batalla por La Nación y conservar empleos en Chile, las intensas campañas por la democratización de las comunicaciones en Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y la pelea por los derechos humanos de nuestros afiliados en Perú. Por supuesto que fueron plasmadas en el transcurso del evento diferencias y debates apasionantes, pero todos fueron abordados con sentimiento de solidaridad. Toda la región es cada vez más fuerte y determinada a jugar un papel mayor dentro del movimiento internacional. Al que crea que el periodismo está en su lecho de muerte, digale que vaya a América Latina a ser testigo del fantástico espíritu y militancia de nuestros sindicatos para defender los empleos, mejorar las condiciones laborales y luchar por un periodismo de calidad.
Al congreso le siguío la conferencia de un día sobre derechos humanos en la Universidad de Santo Domingo.
La última sesión fue una ceremonia conmovedora para lanzar el premio de la FIP por el Periodismo de Tolerancia en la región. Recordé como en Europa la intolerancia y el racismo crecen convirtiéndose en una presión adicional para los periodistas al realizar cubrimientos sobre minorías y las campañas aterradoras en los medios de comunicación contra aquellos que solicitan asilo y musulmanes. Aquí los sindicatos han decidido poner su corazón en acciones que respaldan a aquellos periodistas dispuestos a retar los estereotipos y las discriminaciones, y que están involucrados en promover una mejor concepción de diferencias religiosas y culturales. Humberto Padgett (México), Luis Romero (Panamá), George Rodrigues y Celso Cavalcanti (Brasil) fueron los ganadores.