Tal como ha denunciado la Federación Internacional de Periodistas en distintas oportunidades, el gobierno colombiano ha movilizado a distintos puntos del país centenares de soldados, miembros de la Policía Nacional e integrantes de la fuerza antidisturbios Esmad con el objetivo de obligar a lxs manifestantes a replegarse y hacer cesar las protestas que cubren Colombia. Tras el despliegue de esta intervención, las denuncias por violaciones de derechos humanos, homicidios y abusos de la fuerza pública se cuentan por centenares.
Además de los ataques a la población, entre los que caben destacar actos tan aberrantes como abusos sexuales y violaciones, las fuerzas de seguridad han apuntado hacia trabajadores de prensa. Las agresiones reportadas sobre el sector incluyen disparos de proyectiles a quemarropa y detenciones a personas identificadas como periodistas.
Desde la Federación Internacional de Periodistas, exigimos nuevamente al gobierno de Iván Duque el inmediato cese de las hostilidades contra trabajadores de prensa y el respeto a los derechos constitucionales de la población a su conjunto. La violencia institucional debe parar ya.