Luis Alonzo Almendares tenía una página de Facebook con más de 25 mil seguidores, en la cual publicaba denuncias sobre corrupción, narcotráfico y derechos humanos por las cuales ya había recibido presiones y amenazas. La tarde de su asesinato, se encontraba realizando una transmisión en vivo desde su cuenta, en la que quedó registrado el momento del ataque. Esa grabación y los testimonios que logró dar a las autoridades antes de fallecer producto de las heridas de bala que recibió, fueron determinantes para la investigación.
Las personas detenidas por el asesinato del periodista son Carlos Gutiérrez Lara y Junior Francisco Bonilla Sosa, quienes se encuentran detenidos con prisión preventiva. La Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida solicitó que se inicie el proceso de juicio contra los dos acusados.
Desde la Federación Internacional de Periodistas celebramos este avance en la búsqueda de justicia por Luis Almendares e instamos a las autoridades a que se esclarezcan los motivos por los cuales fue atacado. También reclamamos que se investiguen las razones por las cuales no se investigaron las amenazas denunciadas por el comunicador. Las cifras de muertes violentas de periodistas en Honduras son alarmantes y todos los casos deben ser investigados. Si no se garantiza la seguridad y la integridad física de lxs trabajdorxs de prensa, se pone en peligro la libertad de expresión.